Capítulo 5
El
baile
Aurora se estaba arreglando para el gran evento que se celebraría muy
pronto en la universidad, se había puesto su hermoso vestido azul.
Se estaba maquillando, entró Bella emocionada.
-
¡Ay! Iré con Adam- dijo la chica sonriente
-
Creí que no eran más que amigos...
-
No somos más que amigos... Pero...
-
¿Pero?
-
Está bien, creo que él me gusta... un poco- Aurora
alzó la ceja- Okey, un mucho...
-
Ay... Ya te habías tardado en admitirlo.
-
¡Pero no le digas a nadie! O no volveré a hablarte.
-
Tranquila no le diré a nadie- Aurora sonrió.
Se abrazaron.
Mientras tanto, Elsa también se arreglaba, estaba muy nerviosa. Iría con
Jack... El chico de sus sueños... No, no era el chico de sus sueños... ¿O sí?
Realmente se sentía muy confusa. Siempre que estaba con Jack sentía algo
extraño pero no sabía exactamente si era amor, al fin y al cabo nunca se había
enamorado.
Se puso el vestido alejando un poco esos extraños sentimientos. Era un
vestido azul muy hermoso.
Después se hizo una trenza (la que estaba acostumbrada a usar y se
maquilló).
El baile empezaría hasta las diez, pero ella había quedado de verse con
Jack a las nueve.
Eran las 8:45 y cómo era muy puntual salió de su dormitorio y fue a la
entrada de la universidad, ahí se había quedado de ver con Jack.
A las 8:50 aproximadamente apareció Jack vestido con un elegante traje
que lo hacía lucir muy apuesto.
Llegó y saludo a Elsa con un fuerte abrazo.
-
Hola, preciosa
-
Hola Jack- dijo Elsa con una sonrisa de lado a lado
-
¿Estás lista?
-
Siempre estoy lista.
-
No siempre... Yo conocí a una Elsa insegura que
ocultaba sus poderes...
-
¡Eso es pasado, Jack! Ahora soy libre y dejo que mi
alma me conduzca
-
Pero por supuesto que me gusta más ésta Elsa ¿Qué
quieres hacer ésta hora? Ya que el baile comienza a las diez...
-
Podríamos ir con Anna.
-
Vamos.
A los diez minutos llegaban con Anna, al cual tenía un vestido verde y un
peinado bastante complicado.
-
Hola- dijo Jack.
-
¡Hola!- dijo Anna emocionada, también estaban
Rapunzel y Mérida.
-
¿Y con quién van ustedes?- preguntó Jack.
-
Bueno, yo voy con el guapísimo Hans de Las Islas Del
Sur- dijo Anna usando su mano a modo de
abanico.
-
¿Hans? Anna... ¿Qué te dije sobre él?- dijo Elsa
algo irritada
-
Bueno... Tengo que darle una oportunidad- contestó
Anna, enojada.
-
Yo voy con Flynn, mi novio- dijo Rapunzel intentando
cambiar rápidamente de tema.
-
Flynn es genial- dijo Jack- Tengo suerte de tenerlo
como amigo.
-
Y yo voy con Robin Hood, aunque solo como amigos que
somos- contestó Mérida con una sonrisa
Aurora salió de su dormitorio, ahí estaba Felipe esperándola, vestido con
un smoking de tirantes color negro y con un moño. El chico besó a su novia y la
tomó de la mano.
-
Vamos, tengo un lugar que quiero que conozcas.
-
¡Felipe!
Comenzaron a correr por todo el campus, hasta que llegaron a una fuente
muy bien escondida.
El chico tomó a Aurora de la cintura y acarició su cabello.
-
Te amo
-
Sabes que yo te amo más.
-
Suerte con eso. Siempre te amaré más.
Se volvieron a besar, Felipe cargó a su novia y le susurró algo.
-
Éste será nuestro lugar secreto, acá vendremos
cuando queramos estar solos.
-
Es hermoso.
Se dirigieron a donde se daría el baile. Quedaban veinte minutos.
Bella estaba ya sentada y lista muy bien peinada y maquillada con su
vestido amarillo.
Entonces, alguien tocó la puerta, Bella abrió ansiosa. Era... Hércules.
-
¿Hércules?
-
¿Y Meg?
-
Se está arreglando, ahora la llamo. ¡Megara, te
busca Hércules!
Megara salió muy bien arreglada, con un vestido un poco atrevido. A
Hércules le brillaron los ojos y se lamió los labios.
-
¿Lista?
-
Nunca estuve más lista- tomó la mano de su novio y
ambos se fueron.
Bellas se había quedado sola, Blancanieves ya se había marchado.
Entonces, alguien tocó la puerta. Bella escuchó la voz de Adam.
-
¿Estás lista, preciosa?
La chica abrió la puerta apresuradamente, Adam se veía muy apuesto, con
un smoking azul marino.
-
Claro que estoy lista.
-
¿Vienes?
Adam tomó la mano de Bella y se dirigieron al baile.
Faltaban 10 minutos.
Los diez minutos pasaron lentamente, pero pasaron.
Entraron, el baile era fabuloso. Todo se veía fantástico.
Había una bola de disco en el techo, la banda “The Second Ones” estaba tocando
alegremente, todo era perfecto.
Elsa y Jack entraron muy emocionados. El chico tomó de nuevo la mano de
Elsa y le susurró:
-
¿Por qué eres tan hermosa?
La chica de hielo se sonrojó mucho. Todos los veían y susurraban cosas
como Son tan lindos juntos o Muero de ternura con ellos dos juntos
Después, entraron Meg y Hércules, igual de la mano.
Aurora y Felipe entraron abrazados. Toda clase de parejas desfilaba.
Simba y Nala no fueron la excepción.
Anna y Hans también entraron de la mano.
Los últimos en entrar (Y también los más hablados) fueron Bella y Adam,
se veían muy sonrientes.
Entonces, Alicia (que era la narradora del baile) dijo:
-
Bien... Es hora de que vayan con su pareja y
comiencen a bailar lentamente, porque éste es una vals.
Todos fueron a la pista de baile.
Adam tomó a Bella de la cintura y le susurró.
-
Bella, hay algo que quiero decirte.
-
Pues dilo.
-
Cuando acabe esto del vals te lo diré.
-
De acuerdo.
Bella estaba casi explotando de la alegría.
Seguían bailando aquel vals lentamente.
Cuerpo a cuerpo.
Estaban tan cerca...
Todo era tan maravilloso, Adam era la clase de chico que Bella había
estado esperando. Era un poco presumido y vanidoso, pero tenía un corazón
enorme. Además de que era muy guapo.
Estaba enamorada de sus ojos color azul... ¿Y qué decir de aquellos
labios y ese cabello sedoso?
Y Adam también la amaba, vivía enamorado de aquellos ojos color
chocolate, y de esa voz tan bella y melodiosa.
De ese cabello, y de esa forma de ser y ver el mundo.
Acarició la mejilla de Bella lentamente, la chica sonrió.
Adam la veía fijamente con esos ojos tan hermosos...
Mientras tanto, Blancanieves estaba sentada mientras observaba con
ternura a Bella y Adam.
Entonces, un chico llegó con ella.
-
¿Por qué una joven como tú está tan sola?
-
No lo sé... tal vez sea porque no tengo novio, o una
cita- la chica encogió los hombros.
-
Mi nombre es Taron, ¿Me concedes esta pieza?-
Blancanieves sacó una amplia sonrisa y tomó la mano que Taron acababa de
extender.
-
Claro que sí.
Ariel y Eric bailaban abrazados, la chica suspiraba.
Jim estaba destrozado, tan sólo observaba con la mirada perdida. Sus dos
mejores amigos, Giselle y Tarzán trataban de calmarlo.
-
Vamos... Hay mil chicas- dijo Tarzán.
-
Ella no vale la pena- intentaba consolar Giselle.
Pero el chico no los oía. Sólo pensaba en Ariel y en Eric, mirándose
fijamente y abrazándose.
Meg y Hércules habían dejado el vals y se estaban besando. El chico
azotaba a la chica en la pared y la toqueteaba pervertidamente. Todos los veían
de manera extraña.
Elsa estaba encantada, Jack tenía sus manos en la cintura de la chica, y
la reina de las nieves sus manos sobre los hombros del chico Frost.
Anna y Hans también bailaban, Hans tenía la mirada perdida en los ojos
azules de Anna.
En un rincón del baile estaban Kenai, Pocahontas, Bolt y Kristoff.
-
Es ridículo
eso del vals- Dijo Kristoff mientras mordía una zanahoria.
-
Tienes
razón- comentó Kenai
-
Sólo
lo dices porque el guapo de Hans está con Anna- dijo Pocahontas burlona
-
¿Y eso
qué?- contestó Kristoff irritado
-
No nos
engañas- dijo Bolt- Llevas casi toda tu vida enamorado de ella.
-
Ya la
superé- mintió Kristoff.
-
¡Anna!
¡Ya se está besando con Hans!- mintió Kenai
-
¿QUÉ?-
Dijo Kristoff furioso- Oh... Era una... trampa- el chico bajó la mirada- Bien,
aún no la he superado.
Hans fue al baño, Anna se sentó. Volteó y vio a
Kristoff. Lo saludó con la mano.
-
Vamos,
ve- susurró Pocahontas
Kristoff fue de
mala gana.
-
Hola,
Anna- dijo sonriendo
-
¡Hola
Kristoff! ¿No tienes pareja?
-
No-
Kristoff le sonrió y pensó: Aunque si
quieres puedes ser mi pareja.
-
Bueno,
yo sí, tengo a mi sexy Hans. Creo que quiere que sea su novia...
-
Obviamente
le dirás que se espere porque llevan poco tiempo y...
-
¡No!
¡Le diré que sí inmediatamente!
-
¿Qué?
¿Estás loca?
-
No,
¿Por qué habría de estarlo?
-
No
puedes ser novia de alguien que conociste hace tan poco tiempo.
-
¿Por
qué no? Es amor de verdad.
-
Anna,
no te puedes enamorar tan rápido.
-
¡Sí! Y
si no te molesta mi futuro novio salió del baño ¡Adiós!
Bella seguía
bailando con Adam, entonces, la directora Maléfica entró y gritó.
-
¡Bella
y Vidia! ¡A la dirección!
CONTINUARÁ...