Capítulo 4
Preparativos
Había pasado ya un mes desde que las clases habían comenzado, todos se
estaban acostumbrando a sus nuevos amigos- y enemigos-, a sus nuevos maestros y
a sus nuevos amores.
Era viernes por la noche en la universidad, todos los estudiantes estaban
ansiosos ya que ese día sería la inauguración del nuevo billar de Disney
University. Llamado El Espejo Mágico.
Las pruebas para La Academia De Princesas habían acabado y todas las
chicas que hicieron la prueba aprobaron.
Cenicienta entró a su dormitorio,
ahí estaban Pocahontas, Ariel y Tiana.
-
Hola- dijo la chica.
-
¿Adivinen qué?- gritó Ariel- Ayer estuve con Eric...
Ariel suspiró.
-
No te ofendas- dijo Pocahontas- Pero Eric no parece
el tipo de chico fiel.
-
Pero aun así es muy lindo- contestó Ariel un poco
ofendida.
-
¿Alguien me acompaña al billar?- preguntó Tiana
-
¡Yo voy!- se apuntó Ariel
-
Yo también- dijeron Pocahontas y Cenicienta al mismo
tiempo
Las cuatro llegaron al billar de la universidad, era viernes por la
noche, por lo cual no podía estar más lleno. Los dos equipos de americano
(Héroes y Bestias) se encontraban ahí, en lados apuestos.
Megara le hacía caricias a Hércules, mientras él la besaba.
Tiana y Pocahontas juagaban billar, cuando Tiana iba a tirar, un chico la
detuvo. Tenía tez morena y cabello café.
-
Naveen- dijo Pocahontas irritada.
-
Hola, preciosa- le dijo Naveen a Tiana- ¿Eres nueva?
-
Sí- contestó Tiana irritada.
-
¿Me das un beso?- bromeó el chico.
Tiana se volteó y le dio una cachetada muy bien merecida.
-
Lo siento, no beso ranas.
Naveen se fue ofendido.
Bella estaba sentada hablando con Aurora y Felipe.
-
Y... ¿Cómo se conocieron?- preguntó Bella
-
Por la escuela- dijo Felipe- Desde pequeños somos
amigos, ella siempre me odio.
-
Pero más o menos por secundaria me di cuenta de que
en realidad me gustaba.
-
Qué lindo...
-
¿Y tú cómo conociste a Adam?- preguntó Felipe
-
¿Adam? ¿Qué tiene de especial?
-
¿No están saliendo?- preguntó Felipe
-
¿Qué? ¡No!
-
Oh... Lo siento... Los vi ayer en la cafetería...
-
¡No! ¡No hay nada entre él y yo! Sólo amistad.
-
Se verían tan lindos juntos...- dijo Aurora
-
¡No! ¡No! ¡No!
Aurora soltó una carcajada. Blancanieves llegó.
-
Oye... ¿Por qué esa chica está tan gritona?-
preguntó Blanca señalando a Elsa
-
¿Wendy? No lo sé, siempre está llamando la atención,
aunque es una de las más populares.
-
¿Más que Meg?- preguntó Bella
-
¡Tampoco hay que exagerar!- se burló Felipe- No sé
por qué sale con Hércules...
-
¿Tiene algo de malo?- dijo Aurora, enojada.
-
Sabes cómo es... Tiene novia, está una semana con
ella, las lleva a la cama y luego no les vuelve a hablar.
-
Pero Meg no es tan tonta- contestó Bella.
-
Además al parecer él si la quiere, llevan casi dos
años de novios- dijo Blancanieves- O eso dice ella
-
¡Pues claro! ¡Meg le da popularidad a Hércules y
viceversa!- dijo Aurora
-
Pero...- La frase de Bella se cortó al ver como Adam
se quitaba la playera, abrió los ojos como platos...- ¿Por qué tiene esa manía
de quitarse la playera en público?
-
¡La perdimos!- se burló Blanca.
-
Te está viendo a ti- contestó Aurora- Se está
luciendo contigo...
-
¿Yo? Pero... Mírame, ni siquiera soy un poco guapa.
-
Pero... ¿Qué dices? Eres guapísima- dijo Aurora-
Pero no se nota porque no te arreglas.
Bella se sonrojó al ver que Adam venía, ignorando a Aurora. El chico se
puso la playera. Y aunque Bella jamás lo admitiría, se sintió decepcionada. Se
acercó un poco.
-
Hola- dijo Adam algo apenado al ver el repentino
silencio
-
¡Hola!- dijo Bella
-
¿Cómo están?
-
Bien- comenzó Bella- Aquí platicando un poco... No
estábamos hablando sobre ti, hablábamos sobre... Emm... ¡Tostadas con queso!
Sí, eso ¡Tostadas con queso! ¡Son deliciosas! En lo personal me gustan con
cebolla ¿A ti cómo te gustan?...
-
¡Bella!- dijo Aurora calmando a su parlanchina
amiga.
-
También me gustan con cebolla.
-
¿Y a qué vienes?- dijo Aurora en un tono descortés
-
¿Te molesta mi presencia, Aurora?
-
Nada de eso.
-
Bueno, quería ver si irían mañana al baile de
bienvenida.
-
¡Nosotros sí!- dijo Felipe abrazando a Aurora.
-
¡Yo también!- susurró Blancanieves sintiéndose
excluida.
-
Yo... Supongo que si acabo temprano de estudiar iré
-
¿Estudiar?- dijo Adam levantando una ceja- Los
exámenes son hasta dentro de mucho.
-
¡Siempre hay que estar preparados!
-
Si no les molesta, voy por algo de comer- dijo
Blancanieves- Y a investigar el teléfono de ese chico.
-
Felipe y yo vamos a jugar- dijo Aurora jalando a
Felipe de la mano.
-
Nos dejaron solos, de nuevo- dijo Bella
entrecerrando los ojos.
Adam se quedó embobado viendo a Bella, hoy no traía sus lentes, lo que
hacía relucir sus hermosos ojos, el cabello lo traía recogido en una hermosa trenza
francesa. Venía vestida con una blusa blanca y unos shorts de mezclilla.
-
Me preguntaba- dijo Adam nervioso...
-
¿Te preguntabas?
-
Sí... Sí querías ir al baile conmigo.
-
Al... ¿Baile? ¿El de mañana?
-
Sí.
-
Hum... ¡Sí! ¡Claro!
-
Tal vez haya tostadas con queso- bromeó Adam.
Bella rio.
-
Voy al baño, ahora vuelvo.
Megara se separó de Hércules, por un rato. Su novio se había puesto a
jugar billar.
La chica llegó a la caja del billar.
-
Una cerveza, por favor.
-
¿Para ti?- preguntó la mujer de la cafetería, gorda
y con muchas arrugas. En su gafete Meg leyó: “Oddie”- Digo, no es que diga que
no puedas, pero a las chicas usualmente no les gustan las cervezas.
-
Para mi novio.
-
¿Al que casi te tragas?
-
¿Perdón?
-
Lo besabas como si te lo fueras a comer, linda, tal
vez no deberías de hacer eso en público.
-
Bien- dijo Meg irritada.
-
Y tampoco dejes que te manosee de esa forma.
-
¿Me podría dar mi cerveza?
-
Claro
Mamá Oddie le dio a Meg su cerveza, que irritada se fue después de pagar.
-
¿Quién se cree que es? ¿Mi abuela?
Entonces chocó con alguien.
-
¡Idiota!- dijo Meg
-
No seas tan agresiva, Meg.
Meg alzó la mirada.
-
Vidia. ¿Qué quieres?
-
Quería entregarte esto.
Vidia le entregó a Megara lo que parecía ser un cartel.
-
Gracias.
Meg se fue arrogantemente de regreso a su lugar.
Se sentó y vio el cartel. Casi se le salen los ojos.
Era un cartel de Bella, editado con Photoshop como si fuera una actriz
Playboy.
Debajo tenía escrito: “Bella ¿Tan
santa y virgen cómo asegura?”
-
¡Eres una desgraciada!- gritó Meg a todo volumen-
¿Cómo pudiste hacer esto?
-
¿No te gusta? Le da un toque sexy. ¿No crees?
-
¡Estoy harta de ti y de tus estupideces! ¡Que le
tengas celos a Bella...!
-
¿Celos a la monja? ¡Por favor! Es la niña más matada
que jamás he conocido.
-
Pero ella SÍ tiene suerte con Adam...
Vidia gruñó y se dio media vuelta, ignorando a Meg.
Adam no había oído nada ya que estaba afuera del billar, tomando un poco
de aire.
Bella salió del baño con una gran sonrisa.
-
Linda foto- le dijo Naveen guiñando un ojo.
-
Em... ¿Gracias?
Blancanieves llegó corriendo con ella.
-
¡Bella! ¡Lo siento mucho! Vidia la va a pagar... Ya
verás.
-
¿De qué estás hablando?
-
¿No te has enterado?
-
¿Enterarme de qué?
Blancanieves le dio la foto, Bella tropezó con una silla, los ojos se le
llenaron de lágrimas. La chica vio todo a su alrededor, la gran mayoría la
miraba.
Los chicos con una mirada pervertida, las chicas la veían, algunas con
miradas burlonas y otras con miradas de odio, la joven se dio media vuelta y
salió corriendo.
Pero chocó con alguien, con Adam.
El chico la tomó de la barbilla y le levantó la cara.
-
¿Todo bien?
Bella negó, con los ojos
infestados de lágrimas.
-
¿Qué sucede?- Adam le secó las lagrimas
La chica, sin palabras, le mostró la foto a Adam.
Adam la jaló de la mano, obligándola a meterse más al billar.
-
¿Quién hizo esto?- gritó Adam, furioso.
Vidia se puso de pie.
-
¿Verdad que soy buena con el Photoshop?
-
¡Eres una arpía!
-
¿Qué me dijiste?
-
¡Arpía! En la vida estaría con alguien así
-
Ni yo con un chico como tú- dijo Vidia, dolida.
Adam se dio media vuelta negando con la cabeza. Bella ya se había ido.
El chico corrió afuera, donde estaba Bella, sentada, con la cabeza
apoyada en las rodillas. Llorando.
Adam se sentó junto a ella.
-
Bella... Todo va a estar bien.
-
Esa chica me odia.
-
Pues debes de estar orgullosa, Vidia te tiene celos.
-
¡Una bruja me tiene celos! Vaya ¡Que orgullo!
-
Lo siento... No es lo mejor que pude haber dicho...
El punto es que no debes de temerle a Vidia... Parece peligrosa, pero realmente
no es tan malvada como asegura.
-
Gracias, Adam.
-
Ven, vamos adentro.
-
Prefiero irme...
-
Bueno, vamos... a tomar algo.
Mientras tanto, en el centro comercial...
Rapunzel, Elsa y Anna compraban sus vestidos para el baile. Mérida se
había quedado en el billar, ya tenía un vestido que ponerse.
-
¡Vamos a ir de compras!- gritaba Anna
-
Sí, pero antes...- dijo Elsa- Repasemos las
reglas...
-
No comprar sin tu permiso, No muchos dulces- Dijo
Anna de mala gana
-
Y...- Preguntó Rapunzel sabiendo lo descontrolada
que era Anna en las compras
-
No amenazar al gerente diciendo que mi hermana lo va
a congelar.
-
¡Perfecto!- dijo Elsa complacida.
-
¡Elsa! ¡Es esa tienda!
-
¿Qué tienda?
-
¡La tienda!
-
No te entiendo, Anna.
-
¡De la que te hable!
-
¿La del vestido lindo o la del cajero lindo?
-
¡Ambos! Es la misma tienda. ¡Entremos!
-
Pero... Anna... ¿No es muy cara?
-
¿Qué más da? ¡Coquetear es gratis!
-
Anna...
Pero Anna entró des frenada a la tienda, seguida de Rapunzel. Así que
Elsa no tuvo de otra.
Entró de mala gana, pero al ver la cantidad de vestidos que había no se
negó a seguir ahí un buen rato.
Quasimodo y Esmeralda también estaban ahí adentro, saludaron alegres a
Rapunzel la cual les devolvió el saludo.
Elsa estaba escogiendo un vestido, se fijó en uno color morado. Lo tomó,
y alguien le tomó la mano, estaba fría pero Elsa nunca sentía frío.
-
¿También andas por aquí?- preguntó una voz que Elsa
conocía, la chica sintió mariposas.
-
Jack- dijo fingiendo estar irritada.
-
¿Para qué quieres un vestido?
-
No creo que sea de tu incumbencia, pero para el
baile de bienvenida.
-
¿Y la hermosa chica ya tiene una cita?
-
No, estoy mejor sola.
-
Es una lástima, podríamos ir juntos- susurró Jack en
el oído de Elsa- Claro, si te parece.
-
Bueno, supongo que ir con alguien no sería mala
idea- dijo Elsa tratando de ocultar una sonrisa.
-
Nos vemos ahí, a las nueve.
-
Con gusto.
-
Fue un placer verte, guapa.
Jack le dio un beso en la mejilla y se fue con manos en los bolsillos
después de guiñarle un ojo a Elsa.
Mérida estaba sentada en el billar con sus mejores amigos: Kenai y Elena.
Entonces llegó un chico que también era su amigo se sentó junto a Mérida, rodeo a la pelirroja
con su brazo.
-
¿Cómo está mi arquera favorita?
-
¡Robin! Estoy muy bien- Mérida sonrió.
Kuzco le guiñó un ojo a los cuatro mientras tiraba.
A la noche siguiente abría un evento muy importante y todos estaban ya
muy emocionados, en especial una chica llamada Elsa, la cual moría por ver a
Jack y bailar con él... Pero Vidia rebosaba de alegría... La venganza era
dulce... y apenas comenzaba... Megara le había insultado, y se iba a arrepentir.
CONTINUARÁ...